Presentación de la propuesta de digitalización de los contratos del Foro Ktech

La transformación digital de los contratos en la era de la economía de las plataformas

El Foro Ktech, del Observatorio Legaltech Garrigues-ICADE, lanza su propuesta para la creación de contratos computacionales que ofrezcan mayor eficiencia y seguridad jurídica gracias al uso de la tecnología

La transformación digital de los contratos ha venido para quedarse, especialmente en un mercado inmerso en la economía de las plataformas, donde los usuarios interactúan e intercambian bienes o servicios de manera natural en un entorno digital. En este contexto nace el Foro Ktech del Observatorio Legaltech Garrigues-ICADE, un punto de encuentro cuyo objetivo es analizar y comunicar el impacto que la evolución de la tecnología está teniendo, y va a tener, en los contratos. 

Para ello, propone conceptualizar el contrato como un proceso, formado por distintas fases que se componen de distintos eventos. Esta visión permite analizar qué tecnología se puede aplicar para gestionar los contratos, transformando la forma en la que se desarrollan las relaciones contractuales.

El contrato como proceso

El contrato puede conceptualizarse como un proceso, que se inicia con la negociación del contrato, sigue con su firma y ejecución, y acaba con su terminación. En la actualidad, los contratos se representan como un documento que, tras la firma, queda archivado y desconectado de la realidad que regula, y son las partes las que tienen que llevar a cabo su ejecución. A lo sumo, se realiza un seguimiento de aspectos relacionados con aspectos formales del ciclo de vida del contrato (por ej., avisos en fechas clave). La visión del contrato como un proceso convierte su representación formal en algo más que un documento estático: el contrato pasa a ser un elemento vivo que va cambiando de estado según van ocurriendo los eventos que tienen lugar durante su ciclo de vida. El contrato, por tanto, pasa a ser un elemento conectado con la realidad que regula, y que va operando los distintos eventos que hacen que cambie de estado (por ejemplo, el estado del contrato cambiaría de “borrador” a “firmado”, cuando se produce el evento “firma del contrato”). 

La tecnología de los contratos: el status quo y el contrato computacional

El número de empresas dedicadas a la tecnología de los contratos ha aumentado de forma significativa durante los últimos años, y el mapa de empresas ktech (contracts tech) es muy variado. 

Algunas ktechs se han dedicado a gestionar las fases de preparación y perfección del contrato, incluyendo su negociación, creación y firma, y otras han ido un paso más allá gestionando el archivo y el seguimiento de las obligaciones pactadas (las conocidas como CLMs, por las siglas en inglés de contract lifecycle mangement).

La visión del contrato como proceso que gestiona los eventos que tienen lugar durante su ciclo de vida (que podemos llamar contrato computacional) va un paso más allá del status quo de las ktechs actual, pues pretende gestionar los eventos que afectan la realidad que regula el contrato (y no sólo se ocupa de la preparación, firma, y seguimiento del documento que firman las partes). Así, el contrato computacional puede gestionar los eventos que tienen lugar durante el ciclo de vida (por ejemplo, los pagos, las notificaciones, y las transmisiones de bienes y derechos). Por otro lado, otra funcionalidad de los contratos computacionales es que, para la gestión de estos eventos, puede utilizar tecnología (oráculos) que sirve para consultar información con autoridades proveedoras de información, como puede ser el Registro de la Propiedad o el notario. 

El contrato computacional aporta, por tanto, un valor adicional a las ktechs existentes hoy: una plataforma de gestión de contratos computacionales podría integrar todas las estas funcionalidades, y, además, operar los eventos que ocurren durante el ciclo de vida del contrato (lo que llamamos la consumación o ejecución). 

El contrato computacional como texto, lógica y datos

La representación estática del contrato como documento que se firma y queda archivado tiene que evolucionar para que podamos entender el contrato como algo “vivo” y conectado con la realidad. Así, según la visión del contrato como proceso, el contrato es algo más que el lenguaje natural (texto) que se negocia y firma entre las partes: el contrato es también el sistema que opera y gestiona una serie de eventos que van a tener lugar durante su ciclo de vida. Para que esto sea posible, la representación del contrato tiene que evolucionar y pasar a integrar, además del lenguaje natural (texto), la lógica de programación (pseudocódigo) y el modelo de datos que sirvan para operar los eventos. El contrato pasa, entonces, a estar representado por texto, lógica, y modelo de datos. La representación del contrato como texto, lógica y datos lo hacen entendible por un sistema informático, que es el que va a gestionar y operar los distintos eventos. Es por ello que hablamos de un contrato “computacional”. 

La importancia de la estandarización de los procesos

La concepción del contrato como proceso es útil porque abre la puerta a nuevas formas de hacer cumplir los contratos, mediante el uso de la tecnología. No obstante, para que exista adopción de esta visión, es importante que existan estándares de contratos normalizados. El desarrollo tecnológico que permite operar los eventos del contrato exige que exista un consenso en el sector legal respecto del funcionamiento de los estados y eventos de los contratos, es decir, sobre los derechos y obligaciones que se incluyen en los mismos. Si no existe este consenso y cada contrato que se firme responde a una lógica diferente, el desarrollo tecnológico carecería de sentido. Es por ello que cobra especial relevancia la necesidad de consensuar estándares de los contratos más comunes, y, con ese objetivo, se ha establecido el comité legal del Foro Ktech, donde juristas expertos propondrán estándares de contratos que se puedan adoptar de forma masiva.

Un caso práctico: el contrato de compraventa con arras penitenciales

El Observatorio Legaltech propone analizar, como primer caso práctico, la representación del contrato de compraventa con arras penitenciales como contrato computacional, lo que exige una primera labor de estandarización de los estados y eventos del contrato, y una posterior representación del mismo como texto (lenguaje natural), pseudocódigo (lógica de programación) y datos. 

El comité legal del Foro Ktech está llevando a cabo la labor de estandarización, para la cual han decidido partir de una versión básica del contrato de compraventa con arras penitenciales: el contrato de compraventa entre particulares, con aplicación de derecho común, y de una vivienda sin carga hipotecaria y sin arrendatarios. 

Por otro lado, el comité técnico propondrá una primera implementación del contrato computacional. Además, también se pondrá a disposición de la sociedad el texto completo del contrato, que, aunque estático porque le faltarían el código y los datos, aportaría seguridad jurídica por ser un modelo normalizado por un comité de expertos.